Autor: Alejandro González
LinkedInLas 5 Tendencias Clave en Recursos Humanos para el Éxito en 2025
En un mundo en constante evolución, donde la tecnología y las dinámicas laborales cambian a una velocidad vertiginosa, las empresas deben estar preparadas para enfrentar los desafíos venideros.
El año 2025 se perfila como un hito crucial para la gestión del talento humano, donde las tendencias emergentes dictarán nuevas reglas del juego.
A continuación, exploraremos las cinco tendencias más importantes en Recursos Humanos que no solo transformarán la manera en que trabajamos, sino que también definirán el éxito y la sostenibilidad de las organizaciones en los próximos años.
Salud y bienestar de los empleados
El bienestar como prioridad estratégica
Según la OMS en 2023, México ocupa el primer lugar a nivel mundial en estrés laboral, seguido por China, con un 73%, y Estados Unidos, con un 59%. Esto puede impactar, según datos del IMSS, en el desarrollo de enfermedades como la hipertensión, ansiedad, depresión, entre otras.
Aunque estos datos ya estaban en aumento antes de la pandemia de COVID-19, fue durante esta crisis que se acentuaron, debido a los cambios rápidos en los esquemas de trabajo, como la adopción del teletrabajo y los esquemas escalonados o flexibles.
Estos cambios inicialmente beneficiaron la productividad y el equilibrio entre la vida laboral y personal. Sin embargo, con el regreso a la “normalidad”, los empleados deben readaptarse a esquemas rígidos que, en algunos casos, resultaron ser obsoletos.
Esto resalta la importancia de programas de Desarrollo Organizacional y de Bienestar en las empresas para gestionar la satisfacción y salud en el trabajo de los colaboradores, impactando positivamente en la productividad.
Considerando la tendencia creciente de los empleados a priorizar su bienestar, las empresas se encuentran ante un mercado laboral que valora no solo el salario y las prestaciones, sino también el bienestar como una condición esencial.
Adopción de tecnologías avanzadas
El futuro está aquí
La competitividad está ligada a la rápida adaptación de nuevas tecnologías en los procesos de trabajo. Las empresas que tardan o se resisten a este cambio corren el riesgo de perder competitividad.
El surgimiento de tecnologías avanzadas se da en tres sentidos interrelacionados:
Automatización de procesos
La automatización de procesos busca aumentar la productividad utilizando menos recursos para obtener el mismo resultado. Las empresas deben proporcionar herramientas para la automatización, y al mismo tiempo, el capital humano debe adquirir competencias en este ámbito.
Se valora más al capital humano capaz de utilizar herramientas tecnológicas para automatizar procesos, haciendo más en menos tiempo y facilitando el equilibrio entre trabajo y vida personal.
Inteligencia Artificial
La pregunta en 2025 no es si se debe usar la inteligencia artificial, sino cómo implementarla.
Resistirse al uso de la inteligencia artificial es un error estratégico en la gestión del personal, si no se comprenden sus alcances productivos y los límites éticos.
Los departamentos de Recursos Humanos, junto con los líderes operativos, deben concientizar a los directivos sobre la adaptación de estas herramientas y ayudar a diseñar marcos éticos y normativos para su implementación, integrándolos en los programas de capacitación.
Monitoreo y evaluación
Aunque no son nuevas, las herramientas para monitorear indicadores de desempeño y evaluar el talento humano y el entorno organizacional son esenciales en un contexto que demanda decisiones estratégicas e inmediatas basadas en datos confiables y actualizados.
El uso de plataformas para evaluar el talento humano es obligatorio. Se deben definir y medir indicadores de desempeño mediante modelos como OKR’s, a través de plataformas electrónicas que permitan el reporte y su gestión, o implementando evaluaciones recurrentes de clima organizacional o 360° de manera automática, proporcionando una amplia cobertura sobre el estatus organizacional y del capital humano.
Depender de la percepción individual y tener puntos ciegos en el ámbito organizacional supone un riesgo estratégico que dificulta la toma de decisiones, la optimización y la productividad.
Trabajo híbrido y flexible
Adaptándose a la nueva realidad laboral
En septiembre de 2024, Amazon anunció el regreso al trabajo presencial de todos sus colaboradores. Cuando una empresa de esa envergadura hace este tipo de anuncios, se crea una tendencia que otras empresas tecnológicas suelen seguir.
Elon Musk tomó una decisión similar con sus empresas, generando resistencia entre los empleados, lo que resultó en ultimátums por parte de las direcciones para que acataran la norma, aunque finalmente tuvo que encontrar un punto medio para no perder talento.
Microsoft, por su parte, decidió hacer un estudio de productividad del personal en teletrabajo, lo que los llevó a buscar puntos medios en el trabajo flexible.
Habrá que evaluar el impacto de la decisión de Amazon, aunque se puede adelantar que han estado teniendo problemas con la capacidad inmobiliaria para recibir a los colaboradores.
El talento más competitivo busca esquemas flexibles en equilibrio con salarios y prestaciones. En un mercado laboral de oferta y demanda, las empresas que institucionalizan estos modelos logran atraer dicho talento.
Empresas como Apple y Google ofrecen entornos organizacionales y condiciones físicas de trabajo que hacen que los colaboradores prefieran trabajar presencialmente, aun teniendo la opción de otros esquemas.
Diversidad, Equidad e Inclusión
Un pilar para el crecimiento y la competitividad
Este tema no es nuevo, pero con el nearshoring, las empresas requieren personal más diversificado culturalmente, no solo para cumplir con estándares morales, sino para adaptarse a las dinámicas de los diferentes mercados en los que compiten.
Contar con equipos diversificados culturalmente ayuda a abrirse espacios en mercados objetivos y entenderlos para ser más competitivos.
Además, cuando esta diversidad se da en especializaciones y conocimientos, la empresa experimenta innovaciones en los procesos de trabajo, productos y servicios.
Las empresas con presencia global tienen como común denominador la diversidad y la conclusión que en sus esquemas de trabajo.
Crear entornos inclusivos y equitativos, libres de discriminación, es fundamental. Las empresas deben adoptar políticas equitativas que promuevan la diversidad y aseguren un ambiente respetuoso y seguro para todos los trabajadores.
Aunque esta afirmación puede tener muchas interpretaciones políticas o morales, la idea es establecer bases objetivas, racionales y justas para la administración del capital humano, priorizando la idoneidad del perfil del candidato para el puesto vacante sobre factores étnicos, socioeconómicos o posturas morales que poco impactarán en la productividad.
Además, es importante establecer esquemas de desarrollo y sucesión que prioricen la idoneidad de los perfiles de forma objetiva.
Abrir espacios de trabajo para personas con discapacidad es aprovechar un potencial que otros subestiman y acceder a un mercado laboral competente.
La idea de tener diversidad e inclusión debe verse como una oportunidad estratégica y no solo como una obligación moral.
Desarrollo y movilidad profesional
El aprendizaje continuo como ventaja competitiva
Es crucial invertir en el aprendizaje continuo y el desarrollo profesional de los empleados, fomentando habilidades blandas y duras. Las plataformas de talento impulsadas por IA y los mercados internos de talento ayudarán a promover la movilidad profesional dentro de las organizaciones.
Las empresas en crecimiento deben planificar el crecimiento de su personal, al igual que planean el crecimiento de sus ventas, la expansión de sus operaciones o la cobertura de su mercado.
En 2025, la planificación estratégica es el arma secreta de las empresas transnacionales que invierten en Latinoamérica, y no necesariamente un factor característico de las pequeñas y medianas empresas en México.
Para ser competitivas, las empresas deben establecer esquemas de planificación estratégica que incluyan la gestión del capital humano para garantizar el mejor talento, su desarrollo, retención, satisfacción y productividad.
La idea de que las nuevas generaciones no buscan hacer carrera es errónea. Las nuevas generaciones buscan crecer y desarrollarse, y no estancarse durante años en un puesto de trabajo. Están en constante movimiento para encontrar un espacio donde haya futuro, en un mercado laboral diversificado.
Antes, cuando la oferta laboral era escasa, la prioridad era mantenerse en el trabajo que se tenía. Ahora, se busca encontrar mejores opciones, entre ellas, la que prometa un mejor futuro a largo plazo.
Para reflexionar
La gestión de Recursos Humanos se encuentra en un punto de inflexión donde la adaptación, la innovación y la empatía son claves para el éxito organizacional. La capacidad de una empresa para fomentar el bienestar, adoptar tecnologías, ofrecer flexibilidad laboral, promover la diversidad y apoyar el desarrollo profesional determinará su competitividad en un mercado laboral en constante evolución.
Las tendencias en Recursos Humanos para 2025 subrayan la importancia de un enfoque integral y estratégico para gestionar el talento.
Las empresas que reconozcan y actúen conforme a estos paradigmas estarán mejor posicionadas para atraer, retener y desarrollar a sus empleados, asegurando su éxito y sostenibilidad a largo plazo.